sábado, 15 de noviembre de 2014

ALPINA


Cuenta la historia que en 1945 llegaron a Colombia dos hombres suizos con su visión futurista: Don Max Bazinger y Walter Goggel. Iniciaron la búsqueda de zonas ricas para el acopio de leche y cuando conocieron el valle de Sopó, quedaron fascinados por su similitud con el paisaje suizo. 

En ese entonces, compraban 500 botellas de leche y manualmente elaboraban el queso

diario. Lleno de optimismo se veía a Don Max montar en una carreta tirada por un caballo, cuando iba a la finca productora a recoger la leche en cantinas. Mientras tanto, fue Walter Goggel quien, con un sello que contenía el nombre de ALPINA en manuscrito y en color verde, lo estampó sobre uno de los quesos dando origen al logo de la compañía. Con un préstamo bancario adquirieron un terreno de siete fanegadas para construir la fábrica: una planta sencilla. Desde entonces y hasta el momento, Alpina ha vivido una cultura de calidad, confianza e innovación que nos ha llevado siempre ha trabajar para seguir escribiendo una historia ofreciendo lo mejor. 

El objetivo de alpina en transformación es diseñar e implementar una organización ágil, eficiente, flexible, orientada al cliente y comprometida con calidad y el desarrollo humano, que permita afrontar los cambios competitivos y los nuevos retos en el mercado, mediante la gestión de procesos y la incorporación de nuevas tecnologías. Para llegar al logro de la visión de la Compañía, a través de Alpina en transformación es necesario establecer un modelo organizacional por procesos y trabajo en equipo aprovechando los nuevos sistemas tecnológicos y de información para mejorar los procesos del negocio y el aseguramiento de la calidad.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario